España atraviesa una de las olas de calor más intensas y prolongadas de los últimos años. Desde finales de junio, el país vive jornadas sofocantes con temperaturas que han superado los 43 °C en varias regiones. En El Granado, Huelva, se registró 46° C.
El fenómeno, descrito por meteorólogos como una «cúpula de calor», ha sido propiciado por una potente masa de aire africano que mantiene atrapado el aire caliente sobre la península. Esto ha provocado no solo un aumento sostenido de las temperaturas, sino también un incremento de la mortalidad asociada al calor. Según el Instituto de Salud Carlos III, solo en junio se registraron al menos 365 muertes atribuibles a las altas temperaturas.
El episodio actual se enmarca en una tendencia clara de intensificación de fenómenos extremos ligados al cambio climático. Expertos advierten que estas olas serán más frecuentes, duraderas y peligrosas en los próximos veranos.
Las autoridades insisten en seguir las recomendaciones básicas: evitar la exposición solar en las horas centrales del día, mantenerse hidratado, utilizar ropa ligera y prestar especial atención a niños, ancianos y trabajadores expuestos al sol.
